Camargo, Chih.- Octubre de 2025. El ingeniero Mario Mata, titular de la Junta Central de Agua y Saneamiento del Estado (JCAS), reconoció que la región Centro-Sur de Chihuahua continúa enfrentando las consecuencias de una sequía prolongada de casi seis años, que ha afectado gravemente la actividad agrícola, ganadera y el abasto de agua potable en distintas comunidades.

Durante su visita a Camargo, el funcionario estatal explicó que, con excepción del año 2022 —cuando las lluvias del monzón mexicano beneficiaron temporalmente al estado—, las precipitaciones han sido insuficientes para recuperar los cuerpos de agua.
“Llevamos prácticamente seis años de sequía. Aunque este año llovió bastante, la presa La Boquilla, la más importante de la región, no logró recuperarse totalmente. Necesitamos varios años consecutivos de buenas lluvias para volver a tener un ciclo agrícola completo”, comentó.
Mata detalló que la sequía ha pasado por diferentes etapas: primero meteorológica (por la falta de lluvias), después hidrológica (por el vaciamiento de presas y bordos), y finalmente socioeconómica, al afectar directamente la producción agrícola y los empleos rurales.
“No hubo plan de riegos, y eso provocó pérdidas económicas y desempleo. Esperamos que 2026 y 2027 sean años mejores, porque de lo contrario podríamos enfrentar una nueva crisis hídrica”, advirtió.
El titular de la JCAS aseguró que existe una buena coordinación con la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y con el Gobierno Federal, aunque reconoció que los recortes presupuestales federales han retrasado procesos esenciales, como la autorización de permisos de perforación.
“Conagua tiene personal comprometido, pero carece de insumos suficientes. Eso ha hecho muy lentos los trámites. Aun así, mantenemos comunicación constante con el delegado estatal y trabajamos de manera conjunta”, señaló.
Asimismo, subrayó que el Gobierno del Estado, encabezado por la gobernadora María Eugenia Campos Galván, ha instruido priorizar el abasto doméstico de agua en todas las regiones.
“El primer derecho de uso del agua es el consumo humano. Nuestra gobernadora nos ha pedido asegurar que ningún chihuahuense se quede sin este servicio básico. Ese será el legado de su administración”, afirmó.
Durante la entrevista, se mencionó que comunidades como Las Cuevas y Altavista, en el municipio de Camargo, así como Parrita, en Saucillo, se encuentran entre las más afectadas por la falta de agua potable.
En el caso de Las Cuevas, el problema persiste desde hace más de un año debido a la falta de permiso federal para perforar un nuevo pozo. En Parrita, el terreno ya está disponible y solo falta la autorización de Conagua para iniciar los trabajos.
“En las Cuevas tenemos el compromiso de perforar el pozo en cuanto se otorgue el permiso. Lo mismo en Parrita, donde ya se cuenta con el terreno. Y en Altavista estamos por rehabilitar el pozo antes de que se modifique la Ley de Aguas Nacionales”, explicó Mata.
El funcionario reiteró su disposición para continuar gestionando soluciones a corto y mediano plazo y expresó confianza en que la Federación agilice los permisos pendientes.
“La ley actual es clara: primero está el consumo humano. Por eso esperamos que Conagua nos dé pronto luz verde para resolver estas necesidades tan apremiantes”, concluyó.

 
		